1. Generalidades de la guía para el manejo del dolor traumático y Post-quirúrgico
El dolor post traumático y post quirúrgico, especialmente tras colocación de tutores o material de osteosíntesis, representa uno de los mayores retos clínicos en pacientes con comorbilidades crónicas. Condiciones como insuficiencia renal, enfermedades cardiovasculares, hepáticas o gastrointestinales, limitan drásticamente el uso de analgésicos tradicionales como los AINEs (antiinflamatorios no esteroideos), opioides y esteroides, debido al alto riesgo de efectos adversos graves.
El uso prolongado de AINEs puede precipitar insuficiencia renal o descompensar patologías cardíacas; los opioides, aunque eficaces, conllevan riesgos de dependencia, depresión respiratoria y constipación severa, mientras que los esteroides pueden provocar hiperglucemia, hipertensión o inmunosupresión.
Por ello, se hace urgente y fundamental adoptar un enfoque integrativo, capaz de ofrecer alivio efectivo sin comprometer órganos vitales. La buena noticia es que hoy existen múltiples herramientas clínicas y terapias complementarias avaladas por la ciencia, que permiten atender el dolor desde una perspectiva segura, funcional y humanista.
2. Métodos y Técnicas Alternativas Para el Manejo del dolor
1. Acupuntura Médica
Mecanismo de acción: Estimula la liberación de endorfinas, modula neurotransmisores como la serotonina y regula el sistema nervioso autónomo.
Beneficios: Reducción del dolor, disminución del uso de fármacos, mejora del sueño y la movilidad.
Contraindicaciones: Poca o nula en manos expertas; precaución en pacientes con alteraciones de coagulación o infecciones en piel.
Evidencia: Estudios de Cochrane y JAMA demuestran eficacia en dolor musculoesquelético y postoperatorio [Referencia 1].
2. Terapia Neural
Mecanismo: Aplicación de procaína en puntos gatillo, cicatrices o trayectos nerviosos para despolarizar membranas celulares hiper-activadas o bloqueadas.
Beneficios: Rápido alivio del dolor, regulación del sistema vegetativo, mejora de disfunciones viscerales asociadas.
Contraindicaciones: Alergia a anestésicos locales, infecciones activas.
Evidencia: Casos clínicos y literatura alemana avalan su utilidad en síndromes dolorosos complejos [Referencia 2].
3. Estimulación Nerviosa Transcutánea (TENS)
Mecanismo: Impulsos eléctricos controlados que bloquean la transmisión del dolor en la médula espinal.
Beneficios: Analgesia localizada, segura y sin interacciones medicamentosas.
Contraindicaciones: Marcapasos, epilepsia activa, áreas con lesiones dérmicas extensas.
Evidencia: Recomendado en guías NICE y publicaciones de la revista Pain [Referencia 3].
4. Fisioterapia Especializada y Ejercicio Terapéutico
Mecanismo: Movilización activa y pasiva, técnicas miofasciales y ejercicios específicos que reducen rigidez, inflamación y debilidad muscular.
Beneficios: Mejora funcional, disminución del dolor persistente, prevención de atrofia muscular.
Contraindicaciones: Fases agudas con sangrado activo o inestabilidad de la fractura.
Evidencia: Revisión sistemática en Archives of Physical Medicine and Rehabilitation [Referencia 4].
5. Fitoterapia y Medicina Biorreguladora 
Mecanismo: Uso de extractos vegetales antiinflamatorios (como cúrcuma, harpagofito, boswellia) y complejos biorreguladores homeopáticos para modular el dolor. Estos últimos ameritan todo un capítulo que estamos próximos a editar.
Beneficios: Menor toxicidad orgánica, eficacia en dolores osteoarticulares leves a moderados.
Contraindicaciones: Hipersensibilidad a principios activos naturales, interacciones potenciales.
Evidencia: Estudio multicéntrico sobre dolor crónico no maligno [Referencia 5].
3. Guía Práctica para la Implementación e Individualización del tratamiento
Combinación Estratégica de Métodos:
Fase aguda (primeros 7 días):
Aplicar TENS 2-3 veces al día + acupuntura cada 48-72 h.
Terapia neural solo si hay historia de cicatrices patológicas o disfunción vegetativa.
Fase subaguda (2 a 4 semanas):
Incorporar fisioterapia guiada.
Introducir fitoterapia oral antiinflamatoria suave.
Fase crónica (>4 semanas):
Revisión funcional integral, ajustes posturales, técnicas de relajación y manejo emocional.
4. Casos Clínicos tratados en el consultorio Dr Christian Diaz B.
Caso 1:
Paciente masculino, 67 años, hipertenso y con ERC estadio 3.
Diagnóstico: Fractura de húmero con colocación de placa de osteosíntesis.
Intervención: TENS + Acupuntura + Fitoterapia (boswellia y cúrcuma).
Resultado: Disminución del dolor en 60% a los 10 días. Sin deterioro renal.
Caso 2:
Mujer de 58 años, diabética e hipertensa, operada de fractura de tobillo.
Tratamiento: Fisioterapia supervisada + terapia neural en cicatriz postquirúrgica.
Resultado: Movilidad funcional recuperada en 4 semanas. Control de dolor sin AINEs.
Caso 3:
Paciente de 45 años, con lupus y daño hepático por metotrexato.
Intervención: Acupuntura + meditación homeopatica + TENS.
Resultado: Control efectivo del dolor y mejora de sueño y estado emocional.
5. Advertencias y Seguridad
Supervisión médica constante: todo protocolo debe ser evaluado periódicamente.
Riesgos posibles: mala aplicación de agujas en acupuntura, quemaduras por calor, reacciones alérgicas leves.
Recomendaciones: Suspender terapia ante signos de infección, dolor intenso inusual, o deterioro general. Consultar inmediatamente a un profesional.
6. Conclusión
El manejo del dolor post traumático y post quirúrgico en pacientes con condiciones crónicas es un desafío, pero también una oportunidad para adoptar una medicina más humana, integral y segura. Es posible aliviar el sufrimiento sin dañar órganos vitales ni depender de fármacos agresivos.
Con voluntad, conocimiento y acompañamiento profesional, cada paciente puede encontrar un camino hacia su recuperación funcional y una vida más plena.
Consulta siempre con un médico especializado en dolor y medicina integrativa. Tu bienestar es posible.